Tenía más de un año que no subía a este hermoso sitio y pulmón de nuestra ciudad como es el Ávila, y tengo algunos comentarios que hacerles de mi paseo. Ciertamente hoy más que nunca subir al Humboltd se ha hecho más accesible, ves que en el teleférico nos reunimos caraqueños, venezolanos de otras ciudades y visitas del extranjero, siempre he dicho que un sitio que visitar en nuestra ciudad de concreto es esa bellísma montaña que nos protege, cubre y rodea. Sin embargo, roba un poco de la experiencia el servicio tan poco delicado de mucho de los jóvenes que allí te deben facilitar el acceso, como crítica constructiva, la experiencia de subir a nuestro Waraira Repano no debe ser empañada por nada, hay cuatro taquillas para adquirir las entradas, que consideramos en fin de semana deben estar las cuatro habilitadas, el acceso no debe ser en una cola como si arriaran ganado, tal vez un poco de cola esta bien mientras no nos amuñuñemos contra los otros para entrar. El sistema de números en el suelo para organizar la entrada al funicular lo hace más organizado, no obstantem por seguridad, disfrute y comodidad no deberían montar en el carro más de seis (6) personas, porque con más se hace bastante desagradable.
Ahora bien cuando llegas arriba, encuentras, ese frescor que sólo te dá estar en la cima. Aún encuentras el restaurante Cumbe con su lindas instalaciones, allí hay un plato que es la desgustación de arepas con queso guayanés!!!! Increíble, es tipo fondue, traen un plato con arepitas amasadas con cilantro, ají dulce, papelón y tradicionales, acompañadas de una fonducera con queso guayanés, ciertamente un plato que no podemos perdernos los caraqueños o cualquier otro que nos visite, también tienen el criollo pabellón y variedad de comida mantuana como la polvorosa de pollo.
Al salir de allí hay un café, de ambiente agradable, frente a él había una actividad para niños, como un teatro de calle, lamentablemente hay muchos puestos cerrados que en fin de semana sería ideal mantenerlos abiertos puesto que la cantidad de gente que sube es impresionante, y podríamos promocionar mucho de nuestra artesanía, gastronomía y flores.
Pudimos comprar un libro con la historia y fotos de Caracas, bellísimo en BsF. 50 que nos pareció un maravilloso regalo. Subiendo un poco más te encuentras con una cola que distingues proviene de la Arepera Socialista, que venden sendas arepas en BsF. 7,50, con nombres como la carupanera con chorizo, la guaireña con sardina, la ya tan criolla reina pepiada entre otras.
Recorrimos el resto de las instalaciones e inclusive el Hotel humboltd, que ahora tiene adentro un bar abierto para los visitantes.
Optamos quedarnos en Fondue Restaurant, y de verdad la pasamos estupendo, estuvimos un rato en la barra disfrutando de unos ricos Martinis y luego pasamos a una mesa al lado este del restaurant, con una brisa revitalizante y una vista envidiable, que luego que pasaba la tarde se nubló totalmente y te transporta, pedimos la desgustación de todos los fondue, el de queso con pan, zanahorias y berenjenas, como el de carne pollo y embutidos con salsa ketchup, una mayonesa aumada, miel y otra que parecía mucho ser a base de ají picante y dulce muy a lo peruano, la atención cheverísima y el lugar muy cálido a pesar del frío que lo envuelve al caer la noche.
Aún resulta ser toda una experiencia subir a nuestro Ávila, para desgustar de sus espacios y lo que nos tiene que ofrecer, sólo hay que esmerarse en el cariño de la atención e incorporar unos guías que mantengan el orden y el buen mantenimiento de sus espacios. No dejemos de disfrutar de nuestro hermoso Waraira Repano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Este espacio esta dedicado, sólo para hablar, compartir, proponer y si es necesario advertir, acerca de los sitios ideales de nuestras ciudades para ir a comer rico. Recuerde olvidarse de palabras inapropiadas, temas políticos o cualquier otro que le reste gusto a su paladar.